Texto por: Gabriela Betancourt
Pocos lugares o experiencias nos hacen sentir que estamos fuera de este mundo, y este año el Festival Estéreo Picnic una vez más cumplió con la promesa de llevarnos a vivir “UN MUNDO DISTINTO”. Una nueva locación, que aunque esta vez estaba dentro de Bogotá, nos transportó durante cuatro días a lugares que alguna vez soñamos, junto a la música y entre amigos.
La brecha generacional que existía en el cartel no fue un problema para llevarnos sorpresas todos los días. Existían varias promesas a la nostalgia con bandas y artistas tan esperados como Blink-182, The Offspring, Thirty Seconds To Mars, Placebo, Limp Bizkit y demás. Pero también se cumplieron expectativas ante las propuestas frescas de artistas que han conquistado el mundo recientemente, como Feid, Arca, Sam Smith, SZA, Grupo Frontera, Kevin Karl, Nicki Nicole, Latin Mafia, Dillom y muchos más.
Sin dejar de lado la cuota Indie, que fue perfecta para lograr el balance de un mundo distinto donde el tiempo se detiene. Junto a Arcade Fire, que seguro está dentro del top 3 de cierres de fantasía para este legendario festival. Phoenix, con la energía que Thomas Mars logra contagiar a todo el escenario de una manera más que personal, a través de los brazos que en el aire sostienen sus icónicos “crowd surfing”. The Vaccines se encargó de dar inicio a una noche de película que concluía con Blink-182. La conexión de Poolside con el soleado atardecer y un público dispuesto a dejarse llevar en sus sonidos relajantes y atmosféricos fue realmente mágica.
Nos dejamos cautivar y nos sentimos cercanos al talento local y latinoamericano. Sonidos y letras que nos recuerdan a todos que estamos en lo mismo, donde solo la música puede muchas veces desinhibirnos y llevar correctamente el mensaje. Cada vez somos más los que madrugamos para ser parte de ese algo que cada vez es más grande y no perdernos del show, desde el Kalvo, Selene, Oblivion Mighty Trash, Penyair y demás, hasta Verraco representando desde la electrónica latina. Definitivamente, este fue un gran año también para la electrónica y el Rap dentro del festival, con un escenario que casi fue únicamente para estos géneros. ¿Serán estos los sonidos que actualmente más representan a una ciudad como Bogotá?
Fueron cuatro noches para vivir en el presente pero abrazando la nostalgia del pasado, y ahora bailaremos con ese recuerdo hasta el Festival Estéreo Picnic 2025.