Ya está en las salas de Cinépolis este nuevo film italiano dirigido por Marco Bellocchio
El poder de la iglesia católica es conocido a nivel mundial, la casa de la figura máxima de esta religión se sabe es Italia, lugar que vio el caso de Edgardo Mortara, un niño de siete años que en 1858 fue separado a la fuerza de su familia judía por las autoridades católicas ya que había sido bautizado en secreto y, por lo tanto, debía ser educado como católico.
La historia se desarrolla en un barrio judío de Italia en 1958, en la casa de los Montara, una noche soldados enviados por el Papa irrumpen en su casa para tomar a la fuerza a uno de los nueve hijos; Edgardo es llevado bajo las órdenes eclesiásticas para ser adoctrinado bajo el catolicismo pues la niñera de esta familia lo bautizó en secreto, por lo cual, de acuerdo con la ley papal, el pequeño debe recibir una educación católica o ser considerado un apóstata y recibir el castigo de la inquisición. De pronto, este secuestro de un menor, antes judío, a manos de la iglesia crece al grado de tomar un carácter político nacional.
La historia también se ve a Pío IX, beatificado por el papa Juan Pablo II el 3 de septiembre de 2000, cuando el ejército piamontés entró a Roma y puso fin a la soberanía de los papas, que había durado más de mil años. En la vida real, los padres del Edgardo intentaron recuperarlo tras 12 años. Su hermano mayor, quien peleo contra el clero por años irrumpió en el claustro para recuperar a su hermano menor, sin embargo este no quiso dejar dicho lugar que ya consideraba su hogar. Con el declive del poder eclesiástico, Edgardo pudo reunirse con sus padres pero ya no regresó con él, y en su adolescencia se convirtió en sacerdote.
El secuestro del papa ya está disponible en las salas de arte de Cinépolis. Consulta la cartelera en cinepolis.com
