Así estuvo la séptima edición del festival
Hipnosis se ha consolidado como uno de los festivales más esperados en la Ciudad de México, manteniendo su independencia y fidelidad a la música alternativa y psicodélica. Su edición 2024 no fue la excepción, mostraron una experiencia sonora y visual única, con un cartel que demostró por qué este festival se ha ganado su lugar entre los favoritos de la escena musical en el país.
Desde el momento en que se abrieron las puertas del Estadio Fray Nano, la atmósfera era electrizante. El público, ansioso por sumergirse en los ritmos hipnóticos de propuestas como Melody Fields, o de talento nacional como El Shirota, quienes prendieron de energía ambos escenarios, donde los visuales envolventes capturaban la esencia cósmica y psicodélica de cada acto.
High on Fire y Mdou Moctar añadieron sus toques de brutalidad y blues tuareg al festival, también contamos con propuestas vanguardistas como SUUNS y la psicodelia vibrante de Frankie and the Witch Fingers, Hipnosis abarcó desde el garage hasta el jazz fusión de Mildlife hasta el cosmic-groove, L’eclair.
The Kills creo una conexión entre el rock y fuerza, la voz de Alison Mosshart cautivo a cada uno de los fans, ya que no solo nos entregó una actuación cargada de energía, sino que nos transportó a ese punto donde el rock y la electricidad de las guitarras se fusionan en algo casi sobrenatural. Fue un show perfecto para una gran noche que aún tenía más sorpresas por desatar.
La banda británica Slowdive nos llevó por un mar de melancolía a través de sus suaves melodías, la combinación de guitarras atmosféricas y voces espectrales creó un ambiente mágico, donde cada nota nos transportaba a un paisaje sonoro lleno de emociones.
Una de las actuaciones más esperadas era la de los franceses Air, quienes deslumbraron a todos al interpretar su álbum Moon Safari. Las dulces notas de “Sexy Boy” y la nostálgica melodía de “All I Need” nos llenaron de sentimientos, mientras las guitarras y los sintetizadores espaciales envolvían al público en una atmósfera sorprendente. Los visuales que acompañaban su actuación, con toques futuristas y cósmicos, solo intensificaban la experiencia, haciendo que la presentación se sintiera como una verdadera caricia al alma.
Hipnosis 2024 no solo fue un escaparate de lo mejor de la música alternativa, sino un tributo a la psicodelia en su estado más puro. Con un sonido impecable que envolvía a todos los presentes y un despliegue visual que nos transportó a otros mundos, el festival reafirmó su lugar como un referente en la escena musical.
No fue simplemente un festival; fue un viaje cósmico con visuales alucinantes y una curaduría sonora excelente, este festival se consolidó como una experiencia psicodélica total, una verdadera travesía entre la música y las emociones.