Después de una larga espera, por fin llegó el día, o más bien la noche, en la que Disclosure deleitó a sus seguidores más fieles en un Pepsi Center WTC completamente “sold out”. Con un show impresionante, los hermanos británicos demostraron por qué son uno de los proyectos líderes y más importantes en la industria de la electrónica a nivel mundial.
Sabemos bien que a Disclosure le gusta darse a desear, ya que la cita estaba programada para las 11:30 de la noche, pero la fiesta no podía empezar sin unos cuantos invitados talentosos que calentaron el escenario para nuestros hermanos favoritos. La primera en subir fue Camila Valero. La modelo, actriz y DJ se rifó con un set que encendió la noche con una vibra muy especial, poniendo a todos a bailar. Luego fue el turno de Mau Moctezuma, un mexicano que ha logrado hacerse de un lugar importante en la escena nacional. Mau llevó la energía a otro nivel, haciendo bailar a todos con su singular mezcla. Como sorpresa, invitó al escenario a Natt Calma, quien interpretó algunos temas acompañada del joven y talentoso DJ. Sin darnos cuenta, la noche voló y pronto estábamos a minutos de que Disclosure saliera a escena.
Puntuales, los hermanos Lawrence hicieron su entrada, listos para cumplirle a su público mexicano. Aunque no fue un “live set”, Disclosure se mega rifó con un DJ set donde presentaron los temas más importantes de toda su trayectoria. Sonaron canciones como “When a Fire Starts to Burn”, “For You”, “Holding On”, “Nocturnal” y, por supuesto, uno de los momentos más esperados fue cuando llegó el increíble remix de Flume de “You & Me”, que nos puso la piel chinita de la emoción. Todo esto acompañado de un impresionante juego de luces y visuales que llevaron el show a otro nivel. Definitivamente, todo lo que hacen tiene un sello de garantía. odo iba perfecto hasta que, en medio de la energía y la euforia, durante el tema “She’s Gone, Dance On” ocurrió un pequeño apagón que detuvo el show. Aunque desconcertante, los ánimos no decayeron y lo que parecía un mal augurio terminó siendo solo un pequeño tropezón.
El problema fue resuelto rápidamente, y los últimos 20 minutos del show fueron simplemente espectaculares. Cerraron con broche de oro con sus himnos más grandes, como “Omen”, su colaboración con Sam Smith “Help Me Lose My Mind”, y la inconfundible “Latch”. Para finalizar la noche, sonó “Tondo”, dejando a todos con ganas de más después de esta velada larga pero irrepetible.
A pesar de los imprevistos, Disclosure logró romper la maldición que tenían con México, cumpliendo una deuda pendiente y dejando claro por qué son unos gigantes de la electrónica.
